A esa decisión llegó el Dr. Aldo Lozano, fiscal de feria durante el mes de enero, luego de analizar las pretensiones de los abogados Dr. Pintos y Fernando Bóveda, por las imputadas y con prisión preventiva, Adriana Condorí y María Andrea Condorí, a la que se sumó últimamente Elsa Beatriz Condorí.
Lo insólito es que el Dr. Bóveda planteó la eximición de prisión de ésta última, pero contrariamente a lo que se creía, ésta nunca se presentó espontáneamente ni se entregó a la justicia, como quiso hacer aparecer en su escrito presentado por el letrado. O sea sigue en calidad de prófuga, pese a los pedidos de captura nacional e internacional dictadas en su momento.
Por ello es que en los fundamentos del rechazo a dicho beneficio, el fiscal Lozano lo consideró improcedente, por cuanto no se puede pedir la eximición de prisión si no está detenida.
Esa fue la contestación elevada al Juzgado de Control de feria a cargo del Dr. Jorge Zurueta, que le corrió traslado en su momento acerca de las peticiones de la defensa de las tres hermanas palpaleñas. Ahora dentro del plazo establecido por el Código Procesal Penal de la Provincia el magistrado se expedirá sobre la providencia presentada, merituando los argumentos del fiscal Lozano.
Cabe señalar que las tres hermanas ya habían sido aprehendidas el pasado 12 de setiembre de 2016, pero luego fueron beneficiadas con el cese de detención, en el expediente “Sala, Milagro Amalia Angela; Nieva, Javier Osvaldo; Balconte, Mabel y otros p.s.a. de asociación ilícita, fraude a la administración pública y extorsión; Tolosa Pera, Pablo, y Gutiérrez, p.s.a. de fraude a la administración pública; y Tufiño, Olga, p.s.a. fraude a la administración pública”. En esta causa también se halla imputada y detenida la dirigente Graciela Margarita López. Pero luego se libró orden de aprehensión sobre ellas, siendo sólo habidas Adriana y María Andrea Condorí, Elsa pudo escapar.
Sin embargo en su escrito presentado, Elsa comprometía seriamente a Milagro Sala, Graciela López y Mabel Balconte, desligándose de las acusaciones en su contra. “Viene una persona de máxima confianza de Milagro Sala, de nombre Graciela López y luego la diputada Mabel Balconte”, en la que pedían que lleve gente de su cooperativa “a cobrar cheques de 50 mil pesos, que éstos debían ser entregado a su vez a Balconte, todo ello “en un contexto de máxima presión con el riesgo de perder la fuente de trabajo con la que venía subsistiendo”.
Y agregó que “desconoce el final que ese dinero tenía”, considerándose “otra víctima de los autores principales de los hechos” que se investiga; y anticipando que su declaración “está dispuesta a repetir cuantas veces sea necesaria a fin de que se llegue a la verdad”.
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