Destacan el rol esencial del productor tabacalero en las economías regionales

Hoy se celebra el Día Mundial del Productor Tabacalero. En Jujuy, como en el resto de las provincias productoras, se trata de un actor clave en el desarrollo social y económico de las regiones donde desarrolla su actividad desde hace más de 70 años. La difícil situación sanitaria y económica "ha resaltado una vez más el papel central que juega el productor tabacalero en nuestra región y en el país, y la necesidad de dirigir los esfuerzos a mejorar su productividad de manera sostenible", expresó el especialista en tabaco Martín Miguel Llanos.

En este sentido destacó que la actividad productiva que desarrolla el producto tabacalero "sostiene en nuestra provincia el empleo de más de 20 mil familias en forma directa y otro tanto en forma indirecta ya que su efecto multiplicador y dinamizador de la economía hace que miles de pymes, comercios y emprendedores de la provincia puedan seguir trabajando", remarcó. Por esta razón "es necesario fortalecer este sector productivo que ha contribuido y sigue contribuyendo al desarrollo socioeconómico de la provincia", consideró y destacó que la pandemia "puso en evidencia que la agroindustria tabacalera sigue siendo la matriz productiva por excelencia y el pilar fundamental de la economía de Jujuy". Otro punto a destacar "es el modelo de producción logrado a través de un sector organizado donde los productores están nucleados en cámaras, asociaciones y cooperativas, y a nivel nacional en una federación". "Esto permitió lograr una producción eficiente de buenos rindes y calidad reconocida en los principales mercados del mundo, y mejorar las condiciones de vida de productores y trabajadores". "Destacan en materia de responsabilidad social empresaria, llevando adelante diferentes programas sociales y ambientales en beneficio de la niñez y comunidad en general", enfatizó.

Entre los desafíos para los productores tabacaleros mencionó "la reconversión de la actividad, la búsqueda de actividades complementarias que compensen la disminución de sus ingresos, y adaptarse al nuevo esquema de comercialización, trabajando sobre los costos, buenas prácticas agrícolas, trazabilidad y calidad del tabaco".