INVESTIGAN SUPUESTO AJUSTE DE CUENTAS
Se trata de Gustavo El Oso Pereyra (49), ex ladero de Rafael Di Zeo (55) y uno de los líderes de La 12 durante la década pasada, por lo que los investigadores intentan determinar si se trató de un ajuste de cuentas y, en ese caso, si está relacionado a la barrabrava xeneixe o con su actividad en un sindicato platense.
Según las fuentes, el hecho ocurrió en su casa de la manzana 33, del edificio D6 del barrio Don Orione de Claypole, ubicado en el partido de Almirante Brown, en el sur del conurbano.
Los investigadores aseguraron que un hombre llegó a la casa y preguntó por El Oso Pereyra, quien vivía con su madre, llamada Elba (80) y en ese momento estaba terminando de ducharse.
La mujer, que fue quien atendió a ese desconocido para ella, llamó a su hijo y fue hacia el living, mientras que El Oso salió para hablar en la puerta.
De repente, empezó a escuchar una discusión, su hijo entró corriendo y cerró la puerta, pero el atacante disparó a través de ella.
De acuerdo al breve testimonio que prestó ante a los investigadores, la madre de El Oso explicó que el agresor era un hombre calvo y gordo y que, tras los disparos, escapó.
Pereyra quedó tirado en el piso con múltiples heridas, pero todas efectuadas únicamente en las piernas, por lo que los pesquisas no descartan que hayan querido darle un mensaje y terminaron provocándole la muerte, ya que uno de los disparos le afectó la arteria femoral y prácticamente se desangró.
No obstante, la mujer dio aviso a algunos familiares y vecinos que trasladaron al baleado hasta el Hospital Oñativia, de Rafael Calzada, pero pese a la atención que recibió finalmente murió.
Personal de la comisaría de Almirante Brown que concurrió a la casa de Pereyra encontró en el lugar nueve vainas servidas de una pistola calibre 9 milímetros, las cuales fueron secuestradas posteriormente por la Policía Científica.
El fiscal de turno de Lomas de Zamora, Gerardo Loureyro, concurrió al lugar y ordenó diversas diligencias para dar con el atacante, entre ellas verificar si en la zona hay cámaras de seguridad que pudieran haber registrado el paso del atacante.
En tanto, en las próximas horas se realizará la autopsia al cuerpo en la morgue judicial de Lomas de Zamora.
Además, el fiscal esperaba tomarle testimonio a la madre de la víctima para que aportaba más detalles, pero la mujer permanecía esta tarde en estado de shock a raíz del crimen de su hijo.
Según las fuentes, El Oso actualmente era custodio de un sindicato de empresas de seguridad privada de La Plata y no se le conocía vinculación estrecha con la barra brava de Boca.
Pereyra fue uno de los barras condenados por la Justicia (junto a Rafael Di Zeo) por la agresión a los hinchas de Chacarita Juniors en un partido amistoso jugado en marzo de 1999 en la cancha de Boca.