Especial homenaje a Nicasio Fernández Mar

Así, al recordarse un aniversario más del nacimiento, es que ellas quieren “volver al centro del recuerdo que es como volver a pasar por el corazón una visita al núcleo emocional. Hay lugares de nuestra memoria que tienen poco de risa y llanto, la sonrisa llega por lo pasado, lo vivido, los hermosos recuerdos de viajes y horas maravillosas en el aula; las lágrimas son por mantener en pie en el presente donde se sabe que el retorno es imposible, pero está en cada rincón de nuestra escuela, por allí en algunos lugares de nuestra ciudad y espacios de nuestra Argentina”.

“Era un hombre de aspecto serio, era capaz de hacerte reír con un simple cambio en su expresión, hablaba con la mayor propiedad aunque en realidad, como si te estuviera contando un chiste, hacía un boceto en arcilla para sorprenderte; luego lo trasformaba en una hermosa escultura... Haciendo galas de su prodigiosa imaginación, un verdadero mago lleno de relatos”.

“Pulcro, de aspecto a la conducta. Entrar a su oficina era como entrar a un santuario del orden y la disciplina, pero no era de esas que se ejerce en base a la reprimenda y el castigo, si no la que se gana a partir de la cordialidad el respeto y una dosis siempre justa del buen humor. Con su presencia el profesor Nicasio Fernández Mar logró transmitirnos la definición práctica y concreta de una buena vida y los valores “Gran Maestro un modelo formador de almas y un punto de referencia para aquellos que lo hemos conocido”.