Las Salinas Grandes bajo un manto de agua cristalina

Desde el pasado fin de semana, cuando comenzaron a intensificarse las precipitaciones estivales en la Quebrada y Puna, las Salinas Grandes, una de las 7 Maravillas naturales de la Argentina, permanecen aproximadamente bajo 5 centímetros (o más) de agua intensamente cristalina. Esta característica que se repite anualmente en el salar puneño, se convierte en un atractivo más y muy sorprendente, no sólo para los visitantes de otros países y del exterior, sino también para el mismo jujeño que recorre la provincia.

Gran parte de la superficie del atractivo natural presenta en estos días un espectáculo visual imponente, el agua caída que se mantiene en permanente movimiento por el viento que recorre de punta a punta el salar, genera un bonito paisaje de color turquesa. Esta belleza que sólo es posible observar en temporada de verano, desde enero hasta marzo generalmente, actual y diariamente es admirada por unos 800 turistas, o más, que llegan de distintas partes del país debido a la promoción que posee el destino.

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De continuar las precipitaciones (que es lo más probable en ambas regiones, donde diariamente se registran con variada intensidad y tiempo, mayormente en horas de la tarde), se mantendrá esta atracción, caso contrario el intenso calor puneño evaporará el agua permitiendo la cristalización de la sal. Esta acción hará que la sal se contraiga y encoja produciéndose grietas en su superficie, la tensión hará que ellas se alarguen y se junten a la vez con otras creando en la superficie formas poligonales uniformes.

Durante ese proceso, se puede producir una exudación o bien una acumulación de la sal en polvo, arrastrada por el intenso viento en las grietas, que de a poco va definiéndose como un reborde o un marco en relieve, claramente visible en toda la extensión de la superficie. A medida que va desapareciendo el agua, el salar va tornándose inmaculadamente blanco, que se contrasta con el azul intenso del cielo, insta a jugar con los espejismos y tomar fotografías que hacen posible su óptica singular que también la caracteriza.

Las Salinas Grandes se encuentran a 131 kilómetros de San Salvador de Jujuy y a 66 kilómetros de Purmamarca, se accede transitando la ruta nacional 9 y posteriormente la 52, luego de ascender la Cuesta de Lipán. Llevar sombrero de ala ancha, anteojos oscuros para evitar el reflejo enceguecedor del sol en la sal, agua y abrigo, son algunas de las recomendaciones a tener en cuenta, además del uso de protector solar. Luego, la consigna es disfrutar.