TORNEO DE LA PRIMERA B NACIONAL
Gimnasia reafirma su presente pensando en el futuro. Se modela a fuego lento para transitar el difícil camino en pos de la clasificación, al que solo uno de ellos podrá acceder al final del torneo. Es un desafío que se vive con lógica tensión y prudencia, sabiendo que la dificultad es uno de los tantos escollos a vencer.
El primer examen frente a Instituto dejó en claro que el equipo recién empieza a calibrar su justa dimensión a la luz de los protagonista. Muchos de ellos deben adaptarse al nuevo andamiaje propuesto por Sciacqua para alcanzar su máxima expresión futbolística en el terreno.
Sin embargo, hasta el momento, Gimnasia demuestra orden y actitud. Comienza a definir su perfil futbolístico con libreto propio, Tratando de mantener una misma línea tanto en condición de local como visitante; conciente que en un torneo reducido de estas características no basta con los puntos obtenidos en casa para alimentar una ilusión.
Hasta aquí, la lectura parece ser alentadora. Los jugadores comienzan a ganar confianza y comprender el juego. Esto es lo que pudo verse en este último partido frente a Nueva Chicago, en donde no solo mantuvo la calma, sino, además, la sincronización que a la postre le permitió quedarse con la victoria.
En este nuevo desafío es importante el entendimiento entre el técnico y los jugadores, para que la idea primigenia pueda ser plasmada en su plenitud con el correr de las fechas. Tal vez sea esta la clave para no perecer en el intento cuando se vea en la obligación de revertir un marcador adverso.
Puede decirse que desde el punto de vista posicional los jugadores parecen haber entendido el libreto. De ahora en más, suponemos, el equipo comenzará a potenciarse con las horas de fútbol y las correcciones que el técnico habrá de apuntar en las prácticas.
En este paso a paso Gimnasia demostró una salida rápida desde el fondo hacia arriba, con lo que pudo llegar de forma sorpresiva hacia el arco de enfrente. Y esto hace que su juego no sea previsible, que cuente con medios eficaces para inquietar a la línea de fondo oponente.
Ahora Gimnasia deberá recibir el próximo domingo a Crucero del Norte, equipo que cuenta con idénticas unidades en su haber y que tratará de complicarlo de la forma que lo intentó Instituto. Sin embargo, a esta altura, el Lobo sabrá que es imperioso ganar todos los partidos de local.