Convocó a los secretarios generales de todo el país a fin de acordar una medida de fuerza
Vamos a definir medidas de acción directa y no va a pasar el mes de febrero sin que estas medidas se realicen si el Gobierno no modifica seriamente su actitud, alertó el líder nacional de ATE, Hugo Godoy y anticipó que como mínimo será un paro nacional, a la vez que advirtió que la ola de despidos masivos tiene como antecedente los 95 mil trabajadores precarizados que instauró el gobierno anterior.
El gremialista dijo que además que desde ATE siempre realizan paros activos con movilizaciones y que de esa tradición de lucha saldrá la decisión que tomarán luego de un plenario que realizarán el próximo miércoles.
Godoy calculó que hasta mediados de enero hubo unos 15 mil estatales despedidos, tanto en la administración nacional, como en las provincias y municipios, y si bien dijo que algunos fueron reincorporados, en la segunda quincena del mes ha recrudecido esta serie de despidos masiva.
En ese sentido, cuestionó al Gobierno de Mauricio Macri de implementar un métodos policiaco a la hora de los despidos, pero afirmó que el precedente de la situación que viven los estatales está en la precarización durante la gestión de Cristina Fernández de Kirchner.
Esta ola de despidos masivos que está llevando adelante Mauricio Macri en el gobierno nacional tiene como precedente los 95 mil trabajadores precarizados que instauró el gobierno anterior.
Hay municipios y gobernadores del Frente para la Victoria que también están despidiendo gente. Por eso la pelea tiene que llegar a todos los municipios, provincias, no solo a la Nación, sin distinción del color del que gobierna, sostuvo.
Con respecto a la posibilidad de sumar a otros sectores sindicales a la protesta, Godoy dijo que la discusión de las agrupaciones tiene que darse en las calles, en las asambleas, en la lucha, y no entre dirigentes.
Nuestra tradición es el debate abierto y democrático, no el contubernio entre dirigentes. No va a haber unidad solamente porque dos dirigentes digan que la hay, resaltó.
El viernes, más de 600 trabajadores fueron despedidos de la Casa Rosada, el Ministerio de Cultura y el Banco Central, mientras que desde el Gobierno ratificaron la implementación de un plan de reducción de personal del Estado.