La bodega de Norton, Altura Malbec, Sexy Fish, Talismán y Cosecha Tardía, presentó concurso de acreedores

Víctima de la crisis vitivinícola, se teme que sea el eslabón inicial de una cadena de falencias de Pymes del sector, también financieramente estranguladas.

La centenaria bodega mendocina Norton —propiedad desde 1989 del grupo austríaco Fundación Gernot Langes-Swarovski- no soportó la crisis vitivinícola y se presentó en concurso preventivo ante la Justicia de Mendoza.

Acumula más de $1.400 millones en cheques rechazados y una deuda total cercana a los $1.166 millones.

A principios de octubre, los registros del BCRA mostraban 40 documentos impagos por $618 millones, tres semanas después, el número supera el centenar.

A pesar de esa situación, hasta hace poco figuraba en la categoría más benigna del sistema financiero.

Pero en Luján de Cuyo, donde se ubican sus principales viñedos y la planta elaboradora, trascendieron tensiones internas y recortes que anticipaban el desenlace.

Con este paso judicial, la empresa busca ordenar su pasivo y ganar tiempo para reestructurar sus compromisos.

Calificó la decisión como una medida necesaria para “afrontar un contexto desafiante para la industria vitivinícola, tanto a nivel local como internacional”.

Su CEO, Tomás Lange, quien asumió en julio pasado, señaló: “Reafirmamos nuestro compromiso con nuestros colaboradores y continuaremos trabajando con el mismo espíritu de esfuerzo y excelencia que caracteriza a la bodega desde hace 130 años”.

El ex Campari y Pernod Ricard había reemplazado a Rafael García en la dirección general, con el objetivo de "modernizar la gestión y estabilizar las finanzas".

La compañía viene atravesando una etapa de reestructuración en su management, pero el deterioro del flujo operativo y el encarecimiento del crédito complicaron cualquier margen de maniobra.

FUNDADA EN EL SIGLO XIX Fundada en 1895 por el inglés Edmund James Palmer Norton, la empresa posee 1.200 hectáreas de viñedos propios en Luján de Cuyo y trabaja junto a 140 productores del Valle de Uco, que aportan otras 700 hectáreas, con exportaciones a más de 70 países.

En el mercado local compite con etiquetas como Norton, Altura Malbec, Sexy Fish, Talismán y Cosecha Tardía.

El caso Norton no es aislado. Se teme en el ámbito vitivinícola cuyano que el desplome del consumo interno, la retracción de las exportaciones y el aumento sostenido de los costos productivos que condenaron a Norton arrastren a otras Pymes del vino De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), entre enero y septiembre la comercialización de vinos cayó 2,5% respecto del mismo período del año pasado, mientras que las exportaciones acumularon una baja del 6,3%.

El panorama es aún más preocupante si se considera que 2024 ya había sido un año flojo: según la consultora Scentia, el rubro bebidas alcohólicas registró una caída del 6,8% en volumen durante los primeros nueve meses de 2025, muy por debajo del leve repunte general del consumo.

EXTRANJERIZACIÓN La venta de Norton a capitales extranjeros había anticipado un proceso de internacionalización de la industria vitivinícola argentina que se desencadenó en los ‘90 y que fue clave para el crecimiento que vivió el vino argentino en el exterior.

La Asociación de Viñateros de Mendoza alertó recientemente sobre "una de las peores crisis en décadas", con aumentos de costos en energía, agroquímicos y transporte, y precios de la uva que no acompañan la inflación.

FUENTE:AGENCIA NOTICIAS ARGENTINAS

Ver más:
Ultimas Noticias
Otras Noticias