“No puede estar en la mesa”: el exterminador veto de Milei para un dirigente ante el posible pacto con el PRO

El Gobierno negocia un acuerdo con el PRO en la Ciudad, pero con una dura condición. Le exigen al macrismo que Jorge Macri no participe de las negociaciones.

En plena negociación por las listas de la provincia de Buenos Aires, voces de La Libertad Avanza (LLA) no descartan replicar un acuerdo con el PRO en la Ciudad de Buenos Aires, de cara a las elecciones nacionales del 26 de octubre, aunque con una serie de condicionamientos. Una importante fuente con acceso al despacho presidencial admitió ante la agencia Noticias Argentinas la chance de concretar un nuevo acuerdo electoral con el partido que lidera -en los papeles- Mauricio Macri, con algunos puntos innegociables. Lo cierto es que mientras el armador bonaerense, Sebastián Pareja, se reúne casi a diario con los referentes del PRO de la provincia, Cristian Ritondo, Diego "El Colo" Santilli y Guillermo Montenegro, por la ingeniería electoral para los comicios del 7 de septiembre, hay quienes ya anticipan la chance de volver a confluir en territorio porteño, pero sin la participación del jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri. "Podríamos jugar juntos, pero con una serie de requisitos. El primero es que Jorge Macri no puede estar sentado en la mesa de negociación", afirmó, desafiante, ante la agencia Noticias Argentinas una inobjetable fuente libertaria. La relación del presidente Javier Milei y el alcalde porteño está rota desde hace meses. El mandatario no solo lo acusó de "traidor" en más de una oportunidad sino que evitó saludarlo durante el TeDeum del 25 de mayo en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de Buenos Aires, desplante que quedó inmortalizado por la transmisión oficial. El libertario no le perdona que haya contratado al asesor catalán, Antoni Gutiérrez-Rubí, a quien le factura haber impulsado una campaña sucia en su contra cuando prestaba servicios para el excandidato a presidente de Unión por la Patria Sergio Massa. Ante ese escenario, en las filas libertarias ven como determinante la exclusión del exintendente de Vicente López del entendimiento, y apuestan a negociar directamente otro referente del partido amarillo.

Su primo, Mauricio Macri, corre con otra suerte. Pese a las rayaduras del expresidente contra el entorno de Milei, parece no haber sido alcanzado por la mancha venenosa que salpicó a Jorge, y luego de retomar recientemente vínculos con el asesor presidencial, Santiago Caputo, a quien cuestionó con dureza en el pasado, estaría habilitado a convertirse en una terminal del PRO. Otra de las condiciones que reclama un sector de LLA es eximir del acuerdo a personalidades como la diputada María Eugenia Vidal y la legisladora Silvia Lospennato, muy vinculadas al PRO de Jorge Macri y a la elección del 18 de mayo. "No sería razonable", argumentaron ante esta agencia. En Casa Rosada plantearon que, de concretarse el acuerdo, que todavía varios ponen en duda, no sería por necesidad. "No es de mucha utilidad. Sacaríamos dos senadores nosotros y ellos dos diputados. En términos matemáticos no vemos incentivos, lo único que hace es resolver el debate de por qué vamos juntos en la provincia y no en la Ciudad", justificaron. LAS VOCES LIBERTARIAS DISONANTES Como todo en La Libertad Avanza, existen voces del espacio más exigentes que se oponen a la posibilidad de cerrar un acuerdo con el PRO, lo que abre otro foco de tensión interna que se resolverá cuando la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, la dueña de la lapicera, dé su veredicto.

"La estrategia en octubre es la misma que en mayo", argumentó un alfil al tanto del armado porteño, con el trofeo de la elección de mayo en la vitrina como argumento.

Otro funcionario del karinismo se mostró en sintonía, aunque evitó ser tan tajante: "Hoy no lo veo", planteó ante la agencia Noticias Argentinas. EL PULGAR PARA ARRIBA AMARILLO Desde el corazón del PRO ven con buenos ojos la idea de acordar, e incluso garantizan que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a quien señalan como potencial candidata violeta, les expresó sus deseos de cerrar filas entre ambos espacios. Si bien la funcionaria durante los últimos días evitó subirse al ring electoral, visitó al mandatario el pasado domingo en la quinta de Olivos, y frecuentó los despachos del asesor presidencial, ubicados en el Salón Martín Fierro de Casa Rosada, dos veces en menos de una semana. El cálculo que hacen en el PRO es que si se presentan a elecciones divididos, como ocurrió los comicios locales que consagraron ganador al vocero presidencial, Manuel Adorni, en la competencia por la Legislatura porteña, el resultado será similar.

Estiman que la flamante libertaria conversa sacaría un 40%, el peronismo el 30%, y Vidal, o el candidato que el PRO disponga, alcanzará -de base- un 16%, en una réplica de lo cosechado por Lospennato en su propio territorio.

"Si vamos todos juntos nos abroquelamos en un frente contra el peronismo, empezamos a construir un espacio de centro derecha que le va a venir bien a la Argentina, y encima Patricia se saca de encima a Vidal", sintetizó un legislador amarillo con optimismo, que se jacta de tener "principio de realismo" a la hora de negociar.

FUENTE:AGENCIA NOTICIAS ARGENTINAS

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