El economista afirmó en Rivadavia que alimentos bajaron fuerte en mayo, pero alertó que en junio habrá presión por tarifas y transporte.
El economista Antonio Aracre destacó que durante mayo se produjo “una desaceleración muy fuerte de la inflación”, y estimó que si se midiera el mes en forma pura, el índice estaría “más cerca de 1.5% que de 1.8%”.
“Todavía hay un arrastre estadístico por cómo se calcula el IPC, que compara el promedio de mayo con el de abril, y abril fue alto. Pero si mirás mayo puro, la inflación fue notablemente baja”, afirmó en diálogo con Rivadavia AM 630.
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En ese contexto, Aracre, exasesor de Alberto Fernández, subrayó que el rubro alimentos fue el principal responsable de la baja, lo cual tiene un impacto positivo directo en la canasta básica y los indicadores de pobreza e indigencia.
Sin embargo, anticipó que junio podría mostrar una suba: “Va a ser difícil sostener este número tan bueno porque vas a tener aumentos en tarifas y en transporte”, explicó. Estimó que esos ajustes podrían ubicarse entre el 4% y 6%, lo que pondría en duda que el IPC mantenga un “1 adelante” como en mayo.
Respecto a la acumulación de reservas, otro eje económico central, Aracre explicó que el Gobierno no estaría cumpliendo con la meta fijada por el FMI de sumar 500 millones de dólares: “Probablemente no llegue, pero podría haber un waiver -excepción-”. Aun así, resaltó la estrategia oficial de evitar emitir para intervenir en el mercado de cambios, y valoró positivamente la reciente colocación del Bonte 2030, que recibió ofertas por 1.700 millones de dólares, superando ampliamente el objetivo.
“Cuesta entender esta nueva lógica de no intervenir en el mercado para comprar dólares, pero el Gobierno confía en que el equilibrio fiscal y la baja del riesgo país permitan acceder a los mercados sin usar reservas”, concluyó.
FUENTE:AGENCIA NOTICIAS ARGENTINAS