La canciller de Ecuador, María Fernanda Espinosa, confirmó ayer que el pasado 12 de diciembre su país concedió la naturalización como ecuatoriano al fundador del portal de revelaciones Wikileaks, Julian Assange, en la misma jornada en que el gobierno del Reino Unido se negó a reconocerle al periodista el estatus diplomático.
Espinosa indicó que Assange, de origen australiano, solicitó ese estatus el 16 de septiembre de 2017, tras permanecer alrededor de cinco años y medio bajo la jurisdicción del Estado ecuatoriano, tiempo que lleva refugiado en la embajada ecuatoriana en Londres para eludir una orden de arresto emitido por Suecia por presuntos delitos sexuales.
La constitución de Ecuador señala que la nacionalidad ecuatoriana se obtiene por nacimiento o naturalización (artículo ocho), por lo que Assange es ahora un ciudadano con nacionalidad ecuatoriana y tiene todos los derechos de los nacidos en Ecuador.
De todos modos, Assange no pierde su nacionalidad australiana. Como ciudadano australiano, Suecia le había abierto un proceso por delitos sexuales, el cual archivó en 2017 por falta de avances.
En virtud de las normas internacionales y de la Constitución Ecuador está facultado a conceder la naturalización y su inclusión al estado que le acoge, puntualizó la Canciller.
Ecuador está obligado a respetar los derechos humanos de las personas bajo protección, agregó la diplomática, durante una rueda de prensa que reproduce la agencia DPA.
Espinosa dijo además que la naturalización le da (a Assange) un anillo más de protección al asilado y no altera su condición de persona internacionalmente protegida.
La jefa de la diplomacia ecuatoriana reveló también que su país está explorando otros mecanismos para encontrar una solución, como la consulta sobre este caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), cuya respuesta está pendiente.
Espinosa confirmó que el 20 de diciembre de 2017 solicitó a la Cancillería de Reino Unido que considere la acreditación de Assange como agente diplomático ecuatoriano en su legación en Londres, pedido que el gobierno británico rechazó, según reveló la prensa londinense.
Actualmente se están explorando otras vías de solución, por supuesto en diálogo con el Reino Unido, como una mediación y buenos oficios de autoridades de renombre o de otros estados que puedan facilitar una solución justa y digna, resaltó la jefa de la diplomacia de Ecuador.