Cuando acumulamos muchos objetos, la vida se nos complica: nos cuesta mantener el orden, no podemos limpiar, se contamina el espacio visual de nuestras casas, e incluso, hasta podemos perder la noción de las cosas que efectivamente tenemos. Para hacer la vida un poco más simple, aquí se presenta una selección de los mejores consejos del autor japonés Fumio Sasaki para encontrar la felicidad con lo esencial:
* Empezar con lo que es basura: Tirar los tarros vacíos y la ropa con agujeros y donar los electrodomésticos que se rompieron y que ya está claro que nunca se van a arreglar.
* Mantener los espacios vacíos: cuando vemos una zona en la que no hay cosas, tendemos a pensar que es un lugar sin aprovechar y en seguida lo ocupamos. Es un error. Los espacios abiertos y desocupados aportan paz mental, brindan la sensación de libertad y abren la mente.
* Prestar y pedir prestado: el apego a las cosas también puede verse como un deseo de no molestar a los demás, cuando en realidad, lo único que hace es apartarnos del mundo. Cuando se pide prestado estamos abriendo la posibilidad de establecer un vínculo, además de aportar una excelente excusa para encontrarse.
* Si sumás uno, restá uno: si querés comprar algo nuevo, la premisa es que algo salga. Con la ropa, un buen recurso es tener un número limitado de perchas, para resistir la tentación de sumar más cosas. Esta regla solo aplica a los objetos del mismo tipo.