ACUSÓ A EE.UU.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó que desbarató un supuesto plan para derrocarlo que incluía el desembarco de tropas estadounidenses y la traición de un grupo de militares venezolanos, así como una gran operación de hackeo y sabotaje al proceso electoral de la asamblea constituyente convocada por el mandatario.
No exagero cuando digo que una cadena de eventos que fue planificada para activarse esta semana iba a implicar la llegada de las flotas y tropas gringas a mares venezolanos, a tierras venezolanas, para justificar una operación militar humanitaria y ocupar nuestro país, dijo Maduro, durante el acto con que se celebró el Día del Ejército.
A juicio del jefe del Estado, se trataba de una conspiración elaborada por líderes opositores locales con apoyo de Estados Unidos y cuyo propósito era aumentar el foquismo violento mientras sesionaba en Cancún, México, la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Esa cadena de eventos incluía la condena de la OEA y la aprobación de una declaración intervencionista, así como la creación de lo que llamaban un grupo de contacto, un grupo de países para venir a intervenir Venezuela, sostuvo.
Maduro afirmó que el supuesto plan abarcaba también la traición y el goteo de un grupo de militares activos que salieran a llamar a un golpe de estado y otra serie de eventos que en su desesperación y locura daba como resultado el derrocamiento del gobierno bolivariano.
Asimismo, el mandatario aseguró que el gobierno logró desvelar el centro de operaciones para una gran operación de hackeo y sabotaje del sistema informático del CNE (Consejo Nacional Electoral) para impedir que se realizaran las elecciones del 30 de julio de la asamblea nacional constituyente.
Les hemos dado un golpe a la conspiración contra el proceso electoral y puedo decir que la asamblea nacional constituyente va viento en popa, agregó durante el acto en el que también se conmemoró el 196to. aniversario de la batalla de Carabobo, según reportaron las agencias ANSA y DPA.
En tanto, el defensor del Pueblo, el oficialista Tarek William Saab, afirmó ayer que la sede en San Cristóbal -capital del estado andino Táchira- del organismo que preside fue atacada ayer por un grupo de encapuchados con gasolina y objetos contundentes, consignó EFE.
Según Saab, ya son ocho las sedes de la Defensoría que fueron atacadas en el contexto de las protestas que vienen realizándose casi cotidianamente desde principios de abril y dejaron al menos 75 muertos y 1.300 heridos, según datos oficiales.-
La oposición venezolana marchó el sabado hacia distintas instalaciones militares del país para pedir que no haya más muertos en las manifestaciones contra el gobierno, que en más de dos meses han dejado 76 víctimas, y el vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara, pidió a la Fuerza Armada ¡REBÉLENSE! Únanse al pueblo, mientras el chavismo salió a la calle en el Día del Ejército, que conmemora los 196 años de la Batalla de Carabobo.