Así lo expresaron fuentes cercanas a Macri a los periodistas acreditados en la Casa Rosada, al término del encuentro la primer reunión bilateral entre los presidentes de Argentina y Estados Unidos después de casi 20 años.
Cuando la Casa Rosada comenzaba a volver a la normalidad después del fuerte operativo de seguridad que rodeó la visita oficial de Obama, los funcionarios locales salieron a evaluar como muy positiva la reunión y vaticinaron que el apoyo del presidente de Estados Unidos repercutirá favorablemente en la economía del país.
La reunión bilateral fue muy amena, descontracturada, aclararon en el gobierno, aunque admitieron que el aparente tono seco o fríamente protocolar en el discurso de Macri durante la conferencia de prensa conjunta, se debió en realidad a los nervios que significó estar al lado del presidente de los Estados Unidos. Al respecto, las fuentes interpretaron que finalmente ese tono fue menguado con algunos chistes.
En el Gobierno argentino destacaron como prioritarios los acuerdos para destrabar el comercio bilateral con Estados Unidos -así lo expresaron también abiertamente el embajador en Estados Unidos, Martín Lousteau en diálogo con la prensa en Casa Rosada al término de la conferencia Macri-Obama.