CON UN HOMENAJE A LAS GLORIAS DEL FOLKLORE DE SANTA ROSA
Fue una noche muy especial, con un clima perfecto y la emotividad que se esperaba. Julio Gato García cumplió 20 años transitando el camino de la música folklórica con su canto, y decidió festejarlos haciendo un recorrido por su repertorio de tantos años y reconociendo, a través de un homenaje muy especial, a las que denominó las glorias del Folklore del barrio Santa Rosa.
Quienes crecieron en esa comunidad barrial que casi tiene 50 años de historia, saben de las guitarreadas, de las reuniones en casas y esquinas, donde no faltaban las guitarras y el canto; añoran esos tiempos en los que la juventud despejaba el sueño y se hacía canto.
Con una seriedad a la que no tiene acostumbrado a su público, pero con el carisma y la entrega de siempre, el Gato García comenzó a ofrecer su canto recordando un tema de los Hermanos Valverdi (David y Sergio) y continuó recorriendo temas que grabó en su disco Siete vidas.
Después vinieron los homenajes, a un tanguero como Sergio Morales, quien recordó a su padre, gran bandoneonista y guitarrero de tango, quien le transmitió la pasión por el estilo; siguieron Ernesto Negro Altamirano, uno de los integrantes de Los Kererinkas, junto a Héctor Miguel Mercado y Rafael Díaz, fue él precisamente que quiso rendirle un homenaje también a Paquito Lucas, que hace unos años emprendiera el viaje a la eternidad, como lo hizo (muy joven aún) Gaby Mercado, hijo de Héctor, a quien la emoción no le permitió recibir el merecido tributo a su trayectoria. Luis Paredes, fue recordado a través del canto de sus hijo Gonzalo, hermano Pablo y sobrino Franco.
También se recordó a Sunchu Rumpy, recitador costumbrista y a su hijo, Fernando Quiroga. También se reconoció la trayectoria del locutor Fabián Gorena.
La noche siguió entre canto y música, con afectos cercanos y otros que llegaron desde Buenos Aires, como el santiagueño Buby González, que entregó un par de temas de su autoría.
El Gato García se llevó aplausos, pero sobre todo el afecto de los asistentes, entre los que se encontraron también algunos colegas.