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El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, apostó ayer fuerte a polarizar con el macrismo y abogó por “la unidad” del peronismo de cara a las elecciones de este año, durante un evento en el Instituto Patria ante una platea colmada de kirchneristas, entre ellos el ex jefe de la Secretaría de Inteligencia Oscar Parrilli.
“Tenemos que hacer un programa de todos porque la calle está hablando”, incitó el puntano a la audiencia, para luego remarcar: “Nosotros tenemos diferencias con la marcha del 1-A porque nosotros estamos escribiendo la historia social de la Argentina”.
Allí añadió: “En cambio el 1-A también escribió, habló de no al choripán, habló de no cortar calles. El 1-A, lo de ellos es un código de transeúntes, todo una paquetería, es un código de paquetería. Respetemos que lo hagan, tal vez algo nos sirva”.
Además, le apuntó en forma directa a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, al indicar que la mandataria de la provincia con mayor cantidad de habitantes se había pronunciado por la división del peronismo.
“También, ellos hacen retiros espirituales, y de uno de esos retiros espirituales salió la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, la señora Vidal y dijo: ‘Necesitamos un peronismo dividido en tres’. Por qué un peronismo en dividido en tres, porque con un peronismo dividido en tres, ellos con 28 o 30 puntos se convierten en la primera minoría. Señora Vidal, lo siento pero nosotros necesitamos un peronismo unido”, lanzó el mandatario, quien dijo sentirse “como en casa” en el salón ubicado sobre la calle Rodríguez Peña.
Asimismo, aclaró que “la unidad tiene que ser programática. Y es fácil porque la calle lo está gritando. Debe ser pública, como este tipo de encuentros, y plural, que firmen todos y que una vez que firmen ya estén adentro, y, qué le vamos hacer somos más, el epicentro tiene que ser el peronismo”, explicó.
Para después detallar que el programa “como lo dice la calle” debe decir “paritarias nacionales, paritarias con aumentos salariales por encima del nivel de pobreza, no al cierre de las pymes” y propuso que además diga “una Argentina sin presos políticos, libertad a Milagro Sala”, por lo que cosechó otra ovación de los presentes.
Y hasta tuvo toques de humor como cuando comentó que “es muy importante tener un programa porque por ahí puede pasar que a un diputado lo elijan por un lado y después vota para el otro lado. Puede pasar, no digo que pase, pero puede pasar”, insistió con picardía y cosechó risas, como cuando marcó las diferencias entre las marchas sociales ocurridas en marzo y la del 1-A o cuando recordó: “Es bueno decirle a la CGT fijá una fecha, vieron que dije sólo fijá una fecha”, para añadir que de esa manera “al menos se da al pueblo el poder de tener una fecha”.
La excusa de la reunión fue comentar sobre la experiencia que se vive en su provincia con la decisión de recibir familias de refugiados sirios, y hasta aprovechó para contar las innovaciones que se están haciendo a nivel escolar en San Luis.
Fue recibido por Parrilli, quien lo calificó como “un hombre del campo nacional y popular” y apuntó que con Rodríguez Saá “nos estamos reencontrando, no encontrando, porque siempre estuvimos en el mismo camino”, antes hubo otro giro de humor cuando Parrilli, al comienzo de la presentación reconoció que “algunas veces tomamos caminos paralelos” y “El Alberto”, como le dicen los puntanos, replicó: “Yo no me acuerdo”.
