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ESCRACHE EN 2009: LA QUERELLA APELARÁ ANTE LA CORTE SUPREMA
La Cámara Federal de Casación Penal hizo lugar ayer jueves a un recurso interpuesto por la defensa de la dirigente social Milagro Sala y ordenó que "se dicte una nueva resolución conforme a derecho" en la causa en la que fue condenada a tres años y medio de prisión por daños y amenazas, en el marco de un escrache al actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, en 2009, y por el que se la consideró instigadora.
La defensa del mandatario jujeño anticipó que apelará el decisorio de la nueva conformación de Casación, ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, ya que fue el mismo Alto Tribunal que avaló en noviembre de 2018 la revocación del sobreseimiento del delito de amenazas de la dirigente social y ordenó al Tribunal Oral Federal 1 de Jujuy dicte nueva sentencia. Así en junio del presente año, el TOF N° 1 emitió fallo y la condenó a 3 años y medio de prisión por los delitos de daño agravado y amenazas coactivas en grado de instigadora.
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La decisión adoptada ayer por los jueces de la sala IV de la Cámara, entendieron que la sentencia del TOF no estaba debidamente fundada, e hicieron lugar al planteo de la defensa de Sala, que sostuvo que se trataba de delitos prescriptos, por lo que correspondía dictar su sobreseimiento.
La mayoría conformada por los jueces Javier Carbajo y Liliana Catucci fue la que propuso anular la sentencia y reenviar el expediente al tribunal que intervino para que dicte un nuevo fallo, mientras que la jueza que votó de forma distinta fue Ángela Ledesma (vinculada al sector kirchnerista de Justicia Legítima), quien directamente propuso declarar extinguida la acción penal y sobreseer a todos los acusados. Lo que finalmente decidieron fue "anular el decisorio impugnado y reenviar las presentes actuaciones a su origen a fin de que, por quien corresponda, se dicte una nueva resolución conforme a derecho".
El fallo deja en manos del Tribunal Oral Federal de Jujuy (TOF) el dictado de un nuevo fallo que "sobresea" a los acusados, toda vez que los jueces del tribunal superior compartieron el criterio de que los delitos investigados estaban prescriptos.
Por esta causa, la líder de la Tupac Amaru fue condenada a 3 años de prisión en suspenso en 2016, pero el expediente pasó a la Cámara de Casación, que confirmó esa sentencia por el delito de daños, pero consideró que la prescripción de la acusación por amenazas estaba mal dictada y ordenó al TOF resolver una nueva sentencia, que derivó en una nueva condena.
En aquella oportunidad, la sala IV de Casación estuvo integrada por Gustavo Hornos (como presidente), Mariano Borinsky y Juan Carlos Gemignani. Hoy tiene otra integración, de allí que la nueva sentencia sea totalmente distinta. Un último fallo controversial de la justicia en la gestión de Alberto Fernández, fue el que otorgó la libertad condicional a Amado Boudou, condenado por corrupción en el caso Ciccone.
