LEGITIMACIÓN DE UN GOLPE
El Consejo inició la sesión de más de tres horas de duración luego de que Venezuela intentara sin éxito frenar el encuentro a través de una votación que fue derrotada por 20 votos a favor de proseguir, 12 en contra y dos abstenciones.
Ante una sala llena, Almagro, solicitó al Consejo adoptar las medidas necesarias para abordar la crisis humanitaria inédita e innecesaria en Venezuela, expresarse respecto a los presos políticos y los persistentes informes de tortura, así como apoyar la voluntad del pueblo venezolano en su solicitud de un referendo revocatorio.
El secretario general, que el 31 de mayo presentó su informe para invocar la CDI que en última instancia podría suspender a Caracas como miembro de la OEA, aseveró que el objetivo de la sesión no es castigar ni sancionar a Venezuela sino apoyar a un Estado miembro y ayudarlo a volver al camino de la democracia.
De ese modo, Almagro apoyó la propuesta de constituir un grupo de países de amigos de la OEA para colaborar al diálogo interno en el país caribeño.
Luego de que los delegados de los países reiteraran sus posiciones de apoyo al diálogo entre el gobierno chavista y la oposición, la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, rechazó el informe de Almagro, al cual calificó como un adefesio ideológico, político, jurídico que desconoce expresamente que hay un gobierno legítimo y constitucional en Venezuela.
Se está legitimando un golpe de estado por parte del secretario general de la OEA y se está imposibilitando el diálogo, dijo Rodríguez y agregó que Almagro está convirtiendo al organismo hemisférico en un tribunal de inquisición contra Venezuela.
En la OEA también estuvieron presentes representantes de la oposición venezolana, encabezados por el presidente de la Asamblea Nacional (parlamento), Henry Ramos Allup, que si bien hablaron con los periodistas previamente en otra sala de la OEA, no participaron del encuentro del Consejo Permanente.
No hubo propuesta para que hablara la oposición para no crear una discusión paralela y que la atención quedara en el informe presentado por Almagro, dijo a una fuente cercana al secretario general.
La sesión extraordinaria sobre la invocación de la CDI llegó luego de semanas de discusiones sobre la situación en Venezuela, que hasta el momento incluyó una declaración aprobada por consenso el 1 de este mes que llamó al diálogo entre el gobierno de Caracas y la oposición, así como la presentación este martes de los avances logrados por la iniciativa de la Unasur.