La Selección de Brasil, del posible boicot humanitario a aceptar jugar a disgusto 

COPA AMERICA

La Selección brasileña, en días, pasó de ser considerada "comunista antipatria" por la ultraderecha que gobierna el país, a "timorata o cobarde" por los que respaldaban la decisión de boicotear la Copa América, que comenzará el lunes con apoyo del presidente Jair Bolsonaro. La decisión de aceptar jugar a disgusto puede ser determinante para que hoy el Supremo Tribunal Federal decida a favor de realizar el certamen, con protocolos sanitarios, ante un pedido de la oposición para prohibir la realización del torneo. El movimiento contra la Copa América, desvanecido, se dio luego de que fuera suspendido del cargo el titular de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Rogerio Caboclo, por acoso sexual a una secretaria, a la que le preguntaba -según las grabaciones- si ella se masturbaba, entre otras agresiones machistas. Los jugadores y el cuerpo técnico quedaron, como se dice en Brasil, "arriba del muro" con el manifiesto publicado luego de la victoria histórica 2-0 ante Paraguay por la eliminatoria sudamericana. "Somos trabajadores, profesionales del fútbol. Tenemos una misión que cumplir con la histórica camiseta verde y amarilla, pentacampeona del mundo. Estamos en contra de la organización de la Copa América, pero nunca le diremos que no a la Selección brasileña", afirmaron los futbolistas dirigidos por Adenor Bacchi, Tite, que defenderán el título obtenido en 2019. La suspensión de Caboclo le dio algo de sobrevida a Tite, en la jugada que según la prensa local el propio Gobierno estaba involucrado: contratar a Renato Gaúcho, (admirador de Bolsonaro). Patrocinadores de la Selección, como el banco Itaú, mayor entidad financiera del Hemisferio Sur, habían pedido oficialmente una investigación contra Caboclo. Por otro lado, la tarjeta MasterCard anunció que no activará marketing y publicidad durante la Copa. Los futbolistas eligieron en el comunicado fustigar a la Conmebol y la CBF, pero no se ocuparon de Bolsonaro, tras admitir que hay en el plantel "ideas distintas". "Son cobardes, no tener en cuenta la pandemia y jugar esta Copa América", subrayó Walter Casagrande, comentarista de TV Globo, exjugador de Coritinthians, e integrante del Movimiento Democracia Corintihiana contra la dictadura en los años 82-83, comandado por la mayor estrella del club paulista, Sócrates. "En el comunicado, las palabras pandemia, Covid y vidas no se pronunciaron y Brasil necesita de nuevos Sócrates en el fútbol. Lamentable", dijo la diputada Vivi Reis, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), cuyos dirigentes la semana pasada elogiaron al volante Casemiro por haber lanzado la posibilidad de boicotear la Copa de la Pandemia, llamada por columnistas de la prensa como "Cova América", Tumba América en portugués.

Ultimas Noticias
Otras Noticias