Schmid volvió a repudiar los despidos y las suspensiones en el sector industrial y definió a ese cuadro de situación como una sangría, que relacionó con el incremento de las importaciones.
Consultado sobre el vínculo entre el Gobierno y la CGT, el referente sindical respondió: Es una relación que está en su punto de tensión más grande.El día 7 (de marzo) va a haber una gigantesca protesta en contra del enfoque económico que se está teniendo y, particularmente, en el tema de la industria, la sangría que hay en ese sector, sostuvo. El jefe sindical consideró que el Gobierno ha abandonado, por lo menos, intentar tener un perfil industrial. Que dicho sea de paso nunca lo tuvimos, porque hace 40 años que la Argentina ha abandonado su perfil industrial y lo que hemos tenido son apenas unas primaveras más extensas que otras, admitió.Sin embargo, insistió en que la política económica de la administración de Mauricio Macri genera irritación particularmente en el sector industrial producto de la mala administración del comercio exterior. Yo no estoy diciendo que cierre toda la importación en una economía globalizada. Lo que digo es que tienen que tener una precisa administración del comercio exterior, apuntó.
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