REMARCACION
Omar Príncipe, de Federación Agraria, descartó a su vez que el sector sea formador de precios, y sostuvo: no creo que haya que aconsejar consumir menos carne, porque la demanda interna del producto es una cuestión cultural.
El problema no es nuevo: la destrucción del rodeo empezó en 2005, cuando el gobierno empezó a manipular el mercado y llegó a destruir las exportaciones, dijo Chiesa tras la reunión de la Mesa de Enlace agropecuaria con el ministro Ricardo Buryaile.
Eso -sostuvo- llevó a que en 5 o 6 años la Argentina perdiera 12 millones de cabezas, que es la totalidad del rodeo de Uruguay y casi el mismo de Paraguay.
El dirigente recordó que 60% del stock liquidados eran hembras, con lo cual se vulneró el aparato productor, de manera que la producción mantiene su calidad pero falta carne, y esto no se va a resolver ni en 15 ni en 20 años, aún haciendo las cosas bien.
Chiesa recordó que de todos modos, estamos comiendo 52 o 53 kilos (por habitante y por año), lo que nos convierte en los mayores consumidores del mundo, pero con graves problemas que tenemos que enfrentar y un crecimiento demográfico que probablemente superará la tasa de aumento de nuestro rodeo.
El titular de CRA remarcó que en los últimos días bajó el kilo vivo y subió en la carnicería, porque la cadena minorista tomó prevenciones ante las próximas subas de la electricidad y las paritarias.
El precio final no es sólo la carne, están la distribución, los fletes, los salarios y lo que tiene que ganar cada actor de la cadena, agregó Chiesa.