Solicitamos la nulidad auto de apertura de juicio oral en lo relativo a Cristina de Borbón, afirmó uno de los abogados de la hermana del monarca, Jesús María Silva, esgrimiendo, como se esperaba, la doctrina Botín.
Esta doctrina, que es la última carta que tiene a su favor la infanta para salvarse del proceso, dice que si el Fiscal y el Abogado del Estado, que es el perjudicado en este caso por el delito fiscal, no acusan, la acusación popular sola no puede sentar a alguien en el banquillo.
La infanta, de 50 años, está imputada por cooperar con su esposo en los dos delitos que cometió en 2007 y 2008 contra la Hacienda Pública (evasión fiscal). El seudo sindicato Manos Limpias, que ejerce de acusación popular y es el único querellante en su contra, reclama para ella una pena de 8 años de prisión y una multa de 2 millones de euros.