ULTIMO MOMENTO:
Eliud Kipchoge (34,) campeón olímpico y récordman mundial, ha escrito en el parque Prater de Viena: 1h59m40s y ha roto así un hito.
"Quería dejar claro que ningún ser humano tiene límites"
decía Kipchoge una hora más tarde.
No era una competencia, sino un intento financiado por la petroquímica británica Ineos bajo las mejores condiciones posibles: un circuito totalmente plano, una pista probada con un software de simulación, un clima con 9 grados en la largada, vientos casi nulos e incluso el control de la caída otoñal de las hojas de los árboles. Y equipos de 41 “pacers” o liebres, que se fueron turnando cada 5 kilómetros para garantizarle a Kipchoge un ritmo de 2m50 por kilómetro.
Otro de los aspectos favorables para el keniata fue estuvo acompañado por un equipo de otros 41 corredores que lo beneficiaron en la resistencia del viento y por un auto que le marcaba, a través de un láser, la línea que debía mantener para batir la marca histórica
Pero la hazaña de Kipchoge no será admitida como récord mundial, ya que fue una prueba (llamada Ineos 1.59) acondicionada para él.
Pero no es homologado por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) y aque no fué un circuito certificado y no se realizó control antidóping, dos requerimientos que se hacen en Maratones internacionales
