El Cairo,-Un micro turístico explotó ayer en la zona de las pirámides de Guiza, a las afueras de El Cairo, y dejó al menos tres muertos y otros 11 heridos, informó el ministerio de Interior de Egipto.
Los fallecidos son dos turistas vietnamitas y el guía del grupo, de nacionalidad egipcia, mientas que resultaron heridos diez turistas del país asiático y el conductor del vehículo, según afirmó el primer ministro de Egipto, Mustafa Madbuli, en declaraciones a la prensa que recogió la agencia Efe.
El artefacto explosivo, de fabricación casera, fue colocado junto a un muro en la calle de Al Marriotiya, en el distrito del Haram, de Guiza, donde se encuentran las pirámides, y fue explosionado a las 18.15 hora local (13:15 de Argentina) al paso del autobús, según informó el Ministerio de Interior Egipcio en un comunicado.
Las fuerzas de seguridad se desplazaron inmediatamente a la zona para llevar a cabo la investigación, agregó la nota.
Se trata del primer ataque con explosivos contra turistas ocurrido en Egipto desde el atentado contra un avión ruso a finales de 2015, que se estrelló en la península nororiental del Sinaí tras explotar en el aire, lo que causó la muerte de sus 224 ocupantes.
Sin embargo, en el país árabe son frecuentes los ataques contra las fuerzas de seguridad y, en los últimos dos años, contra civiles, especialmente de la minoría cristiana copta.
Justamente, Egipto se encuentra en estado de emergencia desde abril de 2017, luego de una serie de atentados yihadistas contra iglesias en el delta del Nilo.
El norte de la península del Sinaí, fronteriza con Israel, es la base de operaciones del grupo radical islamista Wilayat Sina, la filial egipcia del Estado Islámico (EI).
En febrero pasado, el Ejército egipcio lanzó una gran campaña militar contra ese grupo extremista, en la que fallecieron al menos 459 supuestos yihadistas, según datos facilitados por los ministerios de Defensa e Interior.
Egipto ha luchado durante años contra milicianos islámicos en la península del Sinaí en una insurgencia que ocasionalmente se ha extendido al resto del país, golpeando a la minoría cristiana o a los turistas. Sin embargo, este es el primer atentado contra turistas extranjeros en casi dos años.
El ataque ocurre en momentos en que el importante sector turístico de Egipto daba muestras de recuperación después de años de desánimo a causa de las revueltas políticas y el caos posterior al levantamiento de 2011, que concluyó con el derrocamiento del expresidente Hosni Mubarak.