Ciudad de México,(ANSA)- El juicio contra Joaquín El Chapo Guzmán lleva apenas una semana de haberse iniciado y ya puso a temblar a medio México, con el desfile de nombres de figuras de alto perfil a quienes se involucra el temido jefe de la más grande empresa criminal del país.
Los personajes de alto perfil mencionados incluyen al actual presidente Enrique Peña, a su antecesor Felipe Calderón y al ex ministro de Seguridad Genero García Luna, así como un ex funcionario que trabajó para el futuro presidente Andrés López Obrador cuando éste era intendente de la capital.
El proceso comenzó a tambor batiente desde el primer día y de inmediato tanto la defensa como la fiscalía eligieron la artillería pesada para abonar a favor de su propia causa y desacreditar a las más altas figuras de la política mexicana.
El abogado de Guzmán en el juicio iniciado el pasado martes 13 en una Corte de Nueva York, Jeffrey Lichtman, aseguró que el cártel de Sinaloa pagó millonarios sobornos a Peña y Calderón, sin precisar cantidades.
En los argumentos iniciales, Lichtman señaló que el mandatario y su antecesor recibieron cientos de millones de dólares de Ismael El Mayo Zambada, de 70 años, a quien calificó como el verdadero hombre fuerte de la organización, quien hasta ahora nunca ha pisado la cárcel.
El propio Peña Nieto, a través de un vocero y el mismo Calderón, a través de Twitter, desacreditaron de inmediato los señalamientos.
El gobierno de Peña Nieto persiguió, capturó y extraditó al criminal Joaquín Guzmán Loera. Las afirmaciones atribuidas a su abogado son completamente falsas y difamatorias, indicó el portavoz del mandatario Eduardo Sánchez, en su cuenta de Twitter.