Los docentes tenemos que ser ese viento que ayude a encender una llamarada para construir un paro nacional, dijo Sonia Alessio, secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), tras detallar hitos de lucha de los maestros y recordar los 30 años de la Marcha Blanca, que antaño también reclamó paritaria y presupuesto nacionales.
Con nosotros solos no alcanza. Unidad de los trabajadores. A continuar la lucha, a no bajar los brazos, con más unidad y más organización, arengó la dirigente desde el palco ante una multitud calculada en 280 mil personas, según los organizadores.
En el mismo sentido, el titular del el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba), Roberto Baradel, pidió en su discurso la unidad de la clase trabajadora para ir hacia un paro general en contra del FMI y de la política de ajuste del gobierno nacional.
Desde el palco levantado sobre la calle Bolívar, con vista a la avenida de Mayo, Eduardo López, de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera) fue el primero de una lista de oradores que representó a cada una de las regiones de país.
Para el gobierno nacional, el paro nacional docente tuvo dispar acatamiento en las distintas provincias: 70% en Santa Fe, 68% en Río Negro, 65% en La Pampa, 60% en Tierra del Fuego, 43% en provincia de Buenos Aires, 40% en el distrito porteño, 35% en Chaco, 30% en Santa Cruz, 15,5% en Córdoba y 4% en Salta.