El tribunal en lo criminal 3 condenó al individuo identificado como Walter Gustavo Maza a la pena de prisión perpetua, al considerarlo autor penalmente responsable del delito de homicidio criminis causae y robo calificado por el uso de arma de fuego en concurso real, hecho ocurrido en la zona del Dique las Maderas, departamento El Carmen, en el año 2013.
Tal cual anticipara Pregón en su edición del viernes último, así lo resolvió el tribunal el pasado viernes 15, en el juicio por el homicidio de Julio César Toledo, chofer de un automóvil remis de la vecina ciudad de Salta.
El hecho sometido a juicio comenzó a desarrollarse el 13 de junio del mencionado año, aproximadamente a las 10:00 horas, cuando Maza se presentó en la empresa de remises La Veloz del Sur, situada en Manuela G. de Tood 1369, en Salta.
Según se refirió, allí solicitó un auto para realizar un viaje hasta la localidad de El Carmen, en la provincia de Jujuy; ante ello, Julio César Toledo le manifestó que lo llevaría, ya que su vehículo se encontraba afuera de la remisería.
El enjuiciado manifestó su interés por las características del vehículo referido, debido, dijo, a que tenía que pasar a retirar unas cosas por la localidad de Guemes. Tras acordar el precio del viaje, partieron.
Siendo las 11:34 horas llegaron a la estación de servicios de GNC San Felipe, en Guemes, donde Maza descendió del vehículo e ingresó al Servi-Compras; después de dialogar unos minutos con una persona se retiró del lugar y volvió a subir al rodado, para dirigirse al destino final que había sido convenido.
Así fue que llegaron al complejo turístico El Balcón, ubicado sobre la ruta provincial 62, del Dique Las Maderas, alrededor de la 14:00 horas.
Ya en ese lugar, y tras bajar del vehículo, Maza se dirigió hablar con el sereno del complejo, al acercarse a éste le mostró la manga izquierda y le manifestó que un perro de su propiedad le habría mordido el brazo.
Seguidamente, le preguntó si tenía un catamarán para alquilar, a lo que el sereno le respondió que no había, que estaban todos rotos, y le indicó que más arriba conseguiría un catamarán para alquilar.
El acusado subió al vehículo y continuaron por la ruta 62 hasta unos trescientos metros del mencionado complejo, donde hizo detener la marcha del automóvil, lugar donde junto a Toledo, descendieron.
Luego de alejarse unos metros del auto, Maza le efectuó varios disparos, con un arma de fuego calibre .9mm, a la víctima, ocasionándole la muerte debido a la gravedad de las heridas producidas.
Inmediatamente, el agresor arrojó unas prendas de vestir de su propiedad y de Toledo a unos 15 a 20 metros de la oficina de Recursos Hídricos, a un costado de la ruta, y tras apoderarse del vehículo emprendió la fuga en dirección al Dique La Ciénaga, con rumbo desconocido. Los fundamentos de la sentencia se darán a conocer dentro de los plazos procesales establecidos, la que podrá ser revisada en una instancia superior. La defensa de Maza había solicitado la absolución del mismo al consideraar que no estaba acreditado que él fuera el autor de los disparos y que testigos sólo mencionaron que lo vieron cuando abordaba el remise en Salta, pero de allí no hubo más testimonios que lo comprometieran seriamente.
En tanto que la Fiscalía de Cámara pidió el máximo de condena, o sea la prisión perpetua porque todas las testimoniales y pruebas colectadas durante la investigación lo señalan como el ejecutor del remisero.