Fuerte reclamo al fin de la impunidad

El presidente de la AMIA, Agustín Zbar, reclamó ayer al gobierno de Mauricio Macri que exija “ante el mundo” el respeto de Irán “por el Poder Judicial argentino”, y advirtió que seguirá con atención “el esfuerzo diplomático” para “renovar las alertas rojas de Interpol para la captura internacional” de los imputados de ese país.

Además, evocó al fiscal Alberto Nisman, de quien dijo que “cumplió con su deber y su muerte está ligada a la causa del atentado”; apuntó contra Teherán porque “produjo el ataque desde un año antes” y advirtió que el ataque “dejó una herida aún sangrante, que se llama impunidad”.

El acto, realizado bajo la consigna “23 años de impunidad en la historia de todos” comenzó a las 9.53, sin el presidente Macri ni referentes de las fuerzas políticas de la oposición, aunque con la presencia del jefe de Gabinete, Marcos Peña, ministros, autoridades comunitarias y familiares de las 85 víctimas y de los más de 300 heridos.

“Confiamos en que el gobierno nacional, que cumplió prontamente su compromiso de terminar con el bochornoso Memorando (de entendimiento con Irán, firmado por el gobierno kirchnerista), haga todos los esfuerzos técnicos y diplomáticos para obtener la denuncia de lo que aquí ocurrió y la exigencia de que la República Islámica de Irán reconozca la jurisdicción nacional”, advirtió Zbar.

Los acusados con orden de captura, considerados autores intelectuales del atentado, son el ex ministro de Defensa iraní Ahmah Vahidi, el ex consejero cultural de la embajada de Irán en Buenos Aires Mohsen Rabbani, el ex ministro de Inteligencia Ali Fallahijan, el ex jefe de la Guardia Revolucionaria Mohsen Rezzai y Ahnmad Reza Ashgari o Mohsen Randjbaran, tercer secretario de la embajada iraní con posible doble identidad.El reclamo fue escuchado por los ministros Germán Garavano (Justicia), Sergio Bergman (Ambiente), Nicolás Dujovne (Hacienda), Carolina Stanley (Desarrollo Social) y los secretarios de Derechos Humanos, Claudio Avruj, y de Cultura, Pablo Avelluto, además del vicejefe del gobierno porteño, Diego Santilli.

El titular de la AMIA dijo que el ataque fue “un golpe contra la democracia y la libertad que tanto nos costó recuperar y que eran en ese entonces casi una novedad en la América del Sur plagada de dictaduras. El terrorismo de Estado que aquí conocimos golpeó desde el exterior a la naciente democracia y dejó una herida aún sangrante, que se llama impunidad”.

“Pedimos la unidad del pueblo argentino para terminar con la impunidad de la AMIA, impunidad que es una pesada carga para la democracia que queremos y para las libertades que defendemos. La impunidad que padecemos es la República que nos falta”, agregó.

Zbar remarcó que la AMIA es “un triste emblema de la impunidad, que destruye la confianza en el sistema de justicia, agrava el daño ya cometido a las víctimas y a la sociedad, y abre el camino para que el delito se vuelva a cometer”.

“En la causa AMIA la impunidad es saber que gran parte de la verdad ya está en el expediente y no poder avanzar más. Sabemos quiénes fueron los que ordenaron y ejecutaron el atentado, pero permanecen sin castigo”, fustigó.

El dirigente pidió además “no permitir que la verdad alcanzada se diluya en teorías conspirativas ni en pactos espurios que benefician a los criminales. Que la verdad de las pruebas, gane la batalla y habrá justicia”.

Sobre Irán dijo que la embajada de ese país en la ciudad de Buenos Aires “decidió producir” el ataque “casi un año antes del ’94 (año del ataque), usando para ello a Hezbollah, una organización que practica el terrorismo como metodología habitual”. El Hezbollah (partido de Dios) es una organización proiraní creada en el Líbano a principios de los años ’80, con un brazo político y otro militar.