Puesteros de la feria minorista de Perico y de comercios aledaños, desocuparon sus locales y otros cerraron sus puertas ayer a los fines de evitar un operativo de control impositivo por parte de la AFIP con apoyo de Gendarmería Nacional. La feria mayorista abrió normalmente.
Un rumor en la noche del domingo hizo entrar en espanto a los propietarios para adoptar semejantes medidas, por cuanto se observó como en numerosos vehículos cargaban sus mercadería para trasladarlos hacia otros inmuebles. De acuerdo a esa versión y atento a lo que ocurrió con la Feria de La Salada de la provincia de Buenos Aires, los feriantes optaron por ocultar mercadería de diferentes rubros para evitar cualquier secuestro ante la carencia de documentación respaldatoria respecto a su procedencia.
Una de las encargadas de un puesto, dijo que la mayoría de los puesteros trae ropa, calzados y otros objetos desde aquella feria bonaerense, y el resto desde Bolivia. De modo que se les hace difícil mostrar a los inspectores la factura de compra de origen ya que en esos sitios son muy pocos mayoristas que proveen documentación fiscal requerida.