RECRUDECIÓ LA VIOLENCIA
La violencia se recrudeció ayer en Siria, luego que dos hospitales fueron atacados en la provincia norteña de Idleb, un bastión de los rebeldes, y 21 civiles murieron, entre ellos 14 niños, poco después de que el Ejército sufrió varios bombardeos en la capital, Damasco, presuntamente lanzados por Israel.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó que 21 personas fallecieron dentro de un hospital y una sala de asistencia médica en Al Der al Sharki, en la provincia de Idleb, y acusó directamente a la aviación rusa, aliada del gobierno sirio de Bashar al Assad.
Asimismo, Khan Sheykhun, la localidad que a principios de mes fue blanco de un ataque con gas sarín, volvió a ser bombardeada anoche, según agregó el Observatorio, una organización pro oposición siria con sede en Londres, citada por la agencia de noticias DPA.
Por otro lado y en otra prueba de la internacionalización de la guerra siria, la Fuerza Aérea israelí atacó hoy con varios misiles depósitos de armas del Ejército sirio en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Damasco, aseguraron fuentes militares sirias citadas por la agencia estatal de noticias Sana. Los misiles fueron lanzados desde los Altos del Golán y provocaron daños materiales.
Una posición militar al suroeste del aeropuerto de Damasco fue al amanecer objetivo de una agresión israelí con cohetes disparados desde el territorio ocupado, que causó explosiones en el lugar que resultaron en daños materiales, dijo una fuente castrense citada por la agencia de noticias oficial siria SANA.
Esta agresión es un intento desesperado de elevar la moral de los grupos terroristas, que se está derrumbando por los golpes de nuestras Fuerzas Armadas, y no nos disuadirá de continuar la lucha contra el terrorismo, agregó la fuente, citada por el Observatorio.
El canal de televisión Al Manar, de la milicia chiita libanesa Hezbollah, por su parte, había denunciado que los bombardeos habían golpeado tanques de petróleo y un almacén.
Las explosiones son probablemente consecuencia de un ataque aéreo israelí, indicó Al Manar, que habló también de graves daños materiales.