Del lado del Gobierno, el director General de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Comunicaciones, Juan Mocoroa, defendió la postura oficial al asegurar que no le perdonaron un mango a (Franco) Macri, ni los intereses al aceptar en junio del año pasado la propuesta presentada por la empresa para pagar una deuda que mantiene desde 2001.
Por su parte, Rodríguez ya le solicitó a la fiscal de Cámara del fuero comercial Gabriela Boquin, la documentación del caso para abrir una investigación interna con vistas a decidir si se impulsa una denuncia penal.
Asimismo, el Gobierno recibió criticas de todo el arco opositor y, además, el Frente para la Victoria presentó en Comodoro Py 2002 cuatro denuncias penales en donde fueron acusados el presidente, Mauricio Macri; su padre, Franco Macri; Mocoroa, señalado como quien avaló la millonaria quita en el marco del concurso de quiebra; el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y hasta el presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici. Las denuncias fueron firmadas por Héctor Recalde, María Teresa García, Eduardo Wado De Pedro, Andrés Cuervo Larroque, Mayra Mendoza, Josefina Fernández, Luana Volnovich y Rodolfo Tailhade; y por dos dirigentes de la agrupación Nuevo Encuentro afín al kirchnerismo, Martín Sabbatella y Gabriela Cerruti. El Estado Nacional aceptó una oferta que, en lo real, implica condonarle la deuda a Correo Argentino. Con un agravante: se trata de condonarle la deuda a la familia presidencial, sostuvo en la denuncia la bancada kirchnerista. En tanto, otros dos abogados, Ricardo Mussa y Daniel Igolnikov, también presentaron sendas denuncias con distintos protagonistas y delitos: el primero acusó al presidente, su padre, el ministro Oscar Aguad y Peña por estafa, incumplimiento de deberes y enriquecimiento ilícito, mientras que el segundo apuntó a Macri, Aguad y los funcionarios que intervinieron y lo amplió a Angelici por tráfico de influencias.
También pidió el dictado de una medida cautelar de no innovar que impida la ejecución del acuerdo entre el Estado y la ex licenciataria del Correo, una empresa del Grupo Macri.
Desde el Frente Renovador, la diputada nacional Graciela Camaño afirmó que parecería que los Macri llegaron al poder para resolver los problemas de los Macri y sostuvo que el acuerdo es un escándalo como los bolsones de (José) López del kirchnerismo. Por su parte, la diputada del GEN Margarita Stolbizer se sumó a las críticas y advirtió que los argumentos del Gobierno no son convincentes, a la vez que sostuvo que no se pueden favorecer negocios con los grupos económicos con los que exista vinculación.
El ex ministro de Defensa del kirchnersimo Agustín Rossi calificó a la maniobra como una estafa al Estado tan bochornosa que sólo puede compararse con la estatización de la deuda que hizo (Domingo) Cavallo en el 82.
Además, el senador nacional Fernando Pino Solanas (Proyecto Sur) lo consideró una flagrante violación a la ética pública y advirtió que como en los 90, los Macri vuelven a realizar negocios privados con fondos públicos. El gobierno de Macri y el Correo Argentino -controlado por Socma Americana SA, de la familia Macri- firmaron el año pasado un acuerdo sobre la deuda por 292 millones de pesos que la empresa tiene con el Estado desde 2001.
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