Hace apenas dos días, alertó a Irán de que "está jugando con fuego", en referencia al reciente lanzamiento de varios misiles por parte del país asiático.
En concreto, las sanciones se dirigen a 13 individuos y 12 entidades relacionados con el programa de misiles balísticos de Teherán.
El continuado apoyo de Irán al terrorismo y desarrollo de su programa de misiles balísticos supone una amenaza a la región, a nuestros socios en todo el mundo y a Estados Unidos, explicó John Smith, el director interino de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro, en un comunicado citado por la agencia de noticias EFE.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, Trump había lanzado esta advertencia a Irán y le acusa de no haber agradecido lo "considerado" que fue su antecesor en el cargo, Barack Obama, con el régimen iraní, con el que la comunidad internacional firmó un acuerdo nuclear.
El multimillonario neoyorquino también aseguraba que él no tendrá la misma actitud que Obama, en un mensaje emitido pocas horas después de que varios medios estadounidenses informaran de que Washington planeaaba ampliar las sanciones contra el régimen iraní.
Estas nuevas sanciones, responderían a la nueva escalada militar emprendida por Teherán tras las pruebas que ha realizado con dos nuevos misiles balísticos.
Según los medios del país del Norte, senadores estadounidenses advertían en una carta enviada ayer a Trump de que los líderes iraníes "deberían sentir suficiente presión para detener sus actividades desestabilizadoras, que incluyen el patrocinio de grupos terroristas y la realización de pruebas con misiles".
En esa misiva, los senadores, entre los que se incluyen demócratas y republicanos, pedían la aplicación completa de las sanciones acordadas hasta ahora contra Teherán y subrayaban la necesidad de adoptar otras adicionales.
Por su parte, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, expresó ayer la "indiferencia" de su país ante las amenazas del presidente de EU, Donald Trump, y aseguró que Irán no va a iniciar una guerra.
Irán indiferente ante las amenazas al obtener seguridad de nuestro pueblo. Nunca iniciaremos la guerra, pero sólo podemos confiar en nuestros propios medios de defensa", dijo Zarif en un mensaje divulgado en su cuenta oficial de Twitter.
El jefe de la diplomacia iraní insistió en que su país no usará sus armas contra nadie, "salvo en defensa propia", como ya afirmó tras la reciente prueba iraní de un misil balístico.
"Veamos si alguno de los que se queja puede hacer esta misma declaración", agregó Zarif, en alusión a la intervención militar estadounidense en varios países como Afganistán o Irak.