El ministro de la Producción, Francisco Cabrera, anunció ayer nuevas normas que regirán para el comercio con el objetivo de impulsar una mayor transparencia en los precios y beneficiar al consumidor, a través de la obligación para los establecimientos comerciales de diferenciar claramente el precio de contado de los productos del de cuotas, y explicitar el costo financiero total de la operación.En una conferencia de prensa que ofreció en la Casa de Gobierno, junto con el secretario de Comercio, Miguel Braun, el ministro señaló que la medida “tiene por objeto dar una mayor transparencia a los precios incentivar el consumo, que en la Argentina es muy importante porque representa alrededor del 80 por ciento del PBI, y generar competencia”.
Precisó que en un marco en el que se prevé una baja de la inflación para este año, que “durante el último semestre fue acumulada del 9 por ciento y anualizada del 18 por ciento, creemos que hay que trabajar sobre la opacidad de los precios y eso hay que corregirlo, sobre todo en el ocultamiento del costo de financiamiento que tienen los precios en cuotas”.
Cabrera explicó que a partir del primero de febrero venidero los comercios “deberán exhibir el costo financiero total de los precios en cuotas”, y que se considerará “pago al contado” el efectuado con “efectivo, débito o crédito en un pago y otros medios de pago electrónicos”.
Anticipó que los planes “Ahora 12” y “Ahora 18” se mantendrán “sin cambios y también deberán exhibir al cliente el costo financiero total”, y comentó que “el total de la población que tienes saldos financiados con tarjetas de crédito es de alrededor del 10 por ciento”.
Por su parte, Braun evaluó que “el primer y más importante impacto de la medida es que van a bajar los precios contado de los productos que hoy se venden”, y tras señalar que antes de tomar esta decisión “se consultó a todos los factores relevantes del mercado”, dijo que involucra “más a comercios que venden bienes durables, no tanto a los supermercados, que no venden tanto en cuotas”.
Destacó que “el Gobierno no controla los precios y el consumidor decide comprar donde más le conviene” y expresó que “estamos convencidos que esta medida va a redundar en una reducción de los precios”, pero que “si eso no sucediera, lo que pensamos es que implica que en ese mercado puntual no haya competencia y sí algún tipo de acuerdo entre los comercio y por lo tanto intervendrá de oficio la Comisión de Defensa del Consumidor”.
Braun indicó que la resolución, que será publicada hoy, “prohibe promocionar como ‘sin interés’ la venta de algún producto que realmente tenga un financiamiento implícito” y que “cualquier incumplimiento, que sea detectado por cualquier inspector de Defensa del Consumidor o por algún consumidor”, será severamente penada.
Para ello “se podrá hacer la denuncia a la Dirección de Nacional de Defensa del Consumidor, a través del número 0800-666-1518, y se podrán aplicar multas de acuerdo a la ley de Defensa del Consumidor y de la ley de Lealtad Comercial de hasta cinco millones de pesos”, advirtió el secretario de Comercio.
A su vez, Cabrera sostuvo que se trata de una medida “muy importante para gente de menores recursos” porque “en Argentina hay una gran parte de la población que no compra en cuotas porque no tiene crédito en la tarjeta, no tiene tarjeta, o tiene gastos excesivos”, por lo cual consideró “impulsar la competencia del contado es importante”.
En ese contexto, Braun agregó que la decisión “permitirá dar mayor transparencia y claridad al consumo, a los precios, a los costos de financiamiento y ello va a redundar en una mayor competencia, por un lado, entre comercios lo cual va a determinar mejores precios y también una competencia entre financiadores, lo que implicará obtener una menor tasa de interés para el financiamiento”.
Destacó que de acuerdo con estimaciones del Banco Central, “se podría esperar una reducción de precios de entre el 15 y el 20 por ciento”, al eliminarse el valor del financiamiento que está incluido en los precios.
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