LLEVO A SUPUESTO RAPTO
Un llamado anónimo denunció que una mujer había sido raptada por un sujeto desconocido, lo cual dio origen a la investigación pertinente por parte de efectivos de la Brigada de Investigaciones y arrojó que se trató de una disputa familiar entre gitanos, sin que hubiera denuncia alguna por parte de éstos en sede policial.
A pesar de ello, los investigadores determinaron que el rodado utilizado por el hombre para hacer subir por la fuerza a la gitana y su pequeño, sería robado o tendría su placa o dominio adulterado, ya que el mismo no se condice con el que figura en el Registro Nacional de Automotores por cuanto correspondería a un Peugeot 207.
Por ese motivo se busca intensamente el rodado un Volkswagen Gol, de color gris, patente KWB 407, donde presuntamente se llevaron a madre e hijo, ya que hasta ayer no se pudo dar con el mismos.
Detectives hicieron las averiguaciones del caso en el domicilio de la mujer que dio el alerta policial y quien fue la única que intentó ayudar a la mujer, aunque en primera instancia no advirtió que los protagonistas eran miembros de la comunidad gitana, que tienen su propia idiosincracia aunque son muy cuestionables.
Es que se pudo saber que tanto el conductor como la mujer que iba caminando con su pequeño, iban discutiendo por varias cuadras de la avenida Corrientes, hasta que en determinado momento y al llegar a la calle León, el sujeto la introdujo de los cabellos en el auto junto al menor, para luego marchar rápidamente a pesar de la oposición que planteó la mujer vecina del lugar.
Tras el hecho, ayer integrantes de la comunidad gitana se mostraron reacios a identificar a los protagonistas del caso, aduciendo que se trataba de una cuestión netamente familiar adjudicando cierta responsabilidad a la mujer por la conducta del hombre que sería su esposo.
De allí que no hubiera denuncia alguna en la Comisaría Seccional Nº 32 de barrio Malvinas, donde se iniciaron las actuaciones sumarias y primarias del caso, pasando el expediente a la División Leyes Especiales de la Brigada de Investigaciones.
Lo ocurrido se viralizó en un primer momento en redes sociales, llevando preocupación a la sociedad por este supuesto rapto, ya que también en los últimos días, se publicó otro caso con datos falsos como que ocurrió en Alto Comedero, cuando en realidad el hecho sucedió en México. Algunas personas, sin saber realmente su procedencia o con mala intencionalidad, la suben a las redes sociales o la comparten, llevando así a un estado de psicosis de los padres.