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Mientras se registraba mayor escasez en la variedad mezcla, que es la más económica, había menos faltantes en la de girasol, aunque el panorama depende de cada supermercado y cada zona del país.
Fuentes supermercadistas de cadenas de la ciudad de Buenos Aires indicaron que el abastecimiento está bien y que “no se llegó al punto de quiebre, de no tener stock”.
“Se resintió la oferta que teníamos disponible por aumento de la demanda del producto. Por los rumores de aumento, la gente salió a comprar”, detallaron las fuentes consultadas.
“Tanto el aceite, como el azúcar y la yerba son categorías muy sensibles que tienen alta demanda de parte del público consumidor, por eso se venden rápido”, describieron.
Consideraron que “el aumento de precio acordado -de 69 centavos para la botella de 900 centímetros cúbicos del aceite mezcla y de $1,50 para el de girasol- no va a ser de tan alto impacto para los clientes”, y agregaron que los productores “se comprometieron a mantener los niveles de abastecimiento que tenían” antes del conflicto.
Advirtieron que aún persiste la sugerencia de compra de dos aceites por familia “porque es un producto sensible, y estos carteles se vienen presentando en las góndolas en los últimos cuatro o cinco años”.
