El ataque fue realizado por Larossi Abballa, un francés de 25 años, que salió de la cárcel en 2013 tras cumplir tres años de prisión incondicional por su pertenencia a redes yihadistas y que hace tres semanas juró lealtad al EI.
El presidente de Francia, Francois Hollande, afirmó que se trató de un acto indiscutiblemente terrorista, al salir ayer de una reunión urgente en el Elíseo con el primer ministro, Manuel Valls, y los de interior, Bernard Cazeneuve y de Justicia, Jean-Jacques Urvoas.
Su autor deseó que su acto fuera reconocido como terrorista, y la organización de la que se reivindicó integrante también asumió la responsabilidad, agregó el mandatario socialista, para luego hizo notar que Francia, sede de la Eurocopa desde el viernes, enfrenta una amenaza terrorista de la mayor importancia.