ULTIMO MOMENTO:
HOY REALIZARAN LA AUTOPSIA
Un hombre que se desempeñaba como peluquero en un sector barrial de Aguas Calientes, departamento de El Carmen, fue encontrado muerto en su domicilio, tras haber sido maniatado y golpeado. Se investiga si el móvil fue un robo ya que además tenía un pequeño negocio.
El lamentable hecho tuvo lugar en el denominado Loteo Ortega de la localidad de Aguas Calientes, distante a 46 kilómetros de la ciudad de El Carmen, cuando cerca de las 21:00 del jueves, un cliente se apersonó a la casa cuya puerta estaba semiabierta. Tocó las manos y no respondían, por lo que llamó a gritos a su dueño, Brígido Aldo Casasola de 67 años de edad, sin que hubiera respuesta. De allí que consultó con un vecino y juntos se adentraron en la vivienda, dándose con el horrendo cuadro.
Inmediatamente dieron cuenta del hecho a la Subcomisaría, por lo que los efectivos policiales corroboraron lo denunciado, al observar a la víctima, tendido en el piso, vestido con su pantalón jean azul y camisa, boca abajo, maniatado y sin signos vitales.
De inmediato se dio la novedad a Jefatura de la Unidad Regional VI con asiento en Perico y desde allí a la Brigada de Investigaciones, previa comunicación a la Fiscalía de Investigación Penal de turno, instruyéndose al Ayudante Fiscal en Perico, Dr. Roberto Iván Monaldi Pancich, realizar las primeras medidas procesales.
Según las primeras apreciaciones de los investigadores, la víctima habría recibido una violenta agresión presumiéndose que los ladrones buscaban dinero por cuanto además de peluquero contaba con un pequeño negocio de venta de elementos de informática como pen drive, memorias, CD y DVD, todo en el mismo inmueble.
Casasola vivía sólo. A prima facie y de acuerdo al diagnóstico preliminar del médico policial, la data de la muerte sería alrededor de las 16:30 del mismo día jueves y por lo tanto no había olor nauseabundo atento a las bajas temperaturas.
Previo a las pericias de la División Criminalística de la UR VI, se halló en la escena del crimen, elementos con rastros de sangre, los cuales fueron secuestrados para peritajes, entre ellos almohadones. De su nariz manaba sangre, pero no se habría advertido señales de heridas de arma blanca o de fuego.
Las especulaciones crecen y tras la autopsia que se realizará hoy en la morgue judicial, se podrá dilucidar si murió por una golpiza o si fue asfixiado atento a que se encontraron los almohadones a su lado, como así también si fue objeto de un robo.
