El ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, descartó ayer que vaya a renunciar y justificó los topes en las tarifas de gas, porque se excedió la capacidad de la gente de poder absorber los aumentos.
No se renuncia 10 veces, sino una sola, y cuando considere que tenga que hacerlo lo haré, dijo Aranguren.
A la vez, el ministro negó discrepancias con su par de Interior, Rogelio Frigerio, según versiones periodísticas.
Lo leí hoy -por ayer- y tengo que desmentirlo. Las reuniones las mantuve con el ministro, somos miembros del mismo equipo y no ha habido tal circunstancia, aseguró.
Sobre los topes en los incrementos al consumo de gas, de 400% para residenciales y 500% para comerciales, el ministro dijo que se atendió el reclamo manifestado por la población y transmitido por las provincias.
Aranguren respaldó la medida por el impacto o la capacidad que puede tener cierta parte de la población afectada, ya que ese alcance puede ser distinto a nivel regional o sectorial.
Por lo tanto -abundó el funcionario- la capacidad de rectificación es algo importante en alguien que puede o quiere tener honestidad intelectual en el impacto de las medidas que toma.