BARNIE SANDERS SEGUIRÁ EN LA INTERNA
La precandidata favorita del partido demócrata gatilló ya la carrera nacional por la presidencia, cuando su campaña calificó al magnate inmobiliario de ser un riesgo demasiado grande para el país. La demócrata ya ve a Trump como candidato tras la renuncia de Ted Cruz después de la victoria del neoyorquino en Indiana.
En un comunicado emitido pocas horas después de que Cruz abandonase la carrera republicana, el jefe de campaña de Clinton, John Podesta, aseguró que Trump no está preparado para mantener seguro a EE.UU. ni para ayudar a salir adelante a las familias trabajadoras.
A lo largo de esta campaña, Donald Trump ha demostrado que es demasiado divisivo y que carece del temperamento para dirigir a nuestra nación y al mundo libre. Con tanto en juego, Donald Trump es, simplemente, un riesgo demasiado grande, indicó Podesta.
Hillary Clinton nos unirá para crear una economía que funcione para todo el mundo, añadió el jefe de campaña de la ex secretaria de Estado (2009-2013).
Trump no perdió el tiempo en replicar lapidario ayer, que la favorita del lado demócrata no debería ni poder presentarse a las elecciones, en una entrevista con la TV MSNBC que difundió la agencia de noticias EFE.
El ya candidato oficioso de los republicanos reconoció además que tiene a varios candidatos a vicepresidente en mente, pero se inclina por la ruta política.
Yo tengo talento en los negocios. Necesito a alguien que me ayude con legislación, que sea amigo de senadores y así evitaremos la vía de la acción ejecutiva, explicó Trump, quien confirmó que también había pensando en un general.
Mi fortaleza es la economía, vamos a traer trabajos y vamos a cerrar acuerdos comerciales muy buenos (...) Una de mis fortalezas va a ser la Defensa, voy a sacarnos del lío de Oriente Medio ganando, vaticinó Trump.
Sanders, por su parte, aprovechó la instalación de Trump como candidato republicano para tratar de reforzar su posición en la interna demócrata, en la que casi todos los analistas lo dan por seguro perdedor.
Después de vencer a Clinton en Indiana, pese a que los sondeos publicados lo daban perdedor hasta por 13 puntos, aseguró, en tercera persona, que según todas las encuestas que he visto en el último mes, Sanders vence a Trump por márgenes mayores que Clinton.
Agregó que Donald Trump, jamás debe ser presidente de EE.UU.
La campaña de Clinton cree que esta campaña (la suya) está acabada, agregó el senador.
Quizá está acabada para los miembros del aparato del partido, pero los votantes en Indiana tenían una idea diferente, desafió pese al amplio margen de delegados de que ya goza la ex primera dama.