ULTIMO MOMENTO:
NO TOMAR EN CUENTA LAS PROTESTAS EN BRASIL
Un eventual gobierno de Michel Temer en Brasil derivará en la privatización de “todo lo que sea posible” en materia de infraestructura, de acuerdo con un informe publicado ayer en los portales de los diarios Folha de Sao Paulo y O Globo.
“El Estado debe transferir para el sector privado todo lo que sea posible en materia de infraestructura”, dice el documento de 17 páginas en el que se fijan las bases de las políticas que planea aplicar Temer en caso de llegar al poder desde la vicepresidencia del país.
Temer accederá a la primera magistratura si la presidenta Dilma Rousseff es apartada de su cargo a raíz de un juicio político que la oposición impulsa en su contra en el Congreso.
El documento, publicado bajo el título “La travesía social”, considera a la inversión privada como una herramienta clave para reactivar la economía de Brasil.
La eventual gestión de Temer considera “indispensable que las relaciones del Estado con contratantes privados sean reguladas por una legislación nueva, inclusive una nueva ley de licitaciones. Es necesario un nuevo comienzo de las relaciones del Estado y las empresas privadas que le prestan servicios”, añade según una versión difundida por la agencia alemana DPA.
Rousseff quedó expuesta a la posibilidad de perder su mandato en un juicio político con el que la oposición procura destituirla o al menos conseguir su apartamiento en forma temporal.
El proceso quedó en manos de una comisión del Senado, luego de que la Cámara de Diputados votara a favor de su inicio.
Si la mayoría simple del Senado brasileño se inclina por la instauración del juicio político, Rousseff deberá dejar su cargo durante 180 días y su lugar será ocupado interinamente por Temer.
NO DARA ATENCIÓN A EVENTUALES PROTESTAS
San Pablo,-El vicepresidente de Brasil, Michel Temer, afirmó que en caso de asumir como jefe del Estado no tomará en cuenta las protestas de los movimientos sociales que defienden el mandato de Dilma Rousseff, blanco de un juicio político.
“Si existe un movimiento callejero, como se anuncia, es un derecho democrático desde que no sea predador, desde que no interrumpa el libre tránsito de personas y, tercero, porque no voy a dar atención a eso, voy a dar a atención a los problemas del país, esta es la función de un presidente”, dijo Temer al canal SBT.
Movimientos sociales vinculados al gobernante Partido de los Trabajadores (PT) y a otros partidos de izquierda que rechazan el juicio político, al considerarlo golpe de Estado, anunciaron que bloquearan un eventual gobierno de Temer, el vicepresidente que desembarcó del gobierno hace tres semanas e impulsa un gabinete junto con partidos de oposición.
